Filosofía Artística

Victoria Febrer Mi interés en imágenes visuales se centra alrededor de la relación entre lo universal y lo personal. En lugar de estar en oposición, estos forman una relación que puede conducir a un entendimiento más profundo. Mi obra investiga esta idea de varios modos, pero mi interés principal surgió de meditaciones sobre el mecanismo de la memoria y las semejanzas a la producción de imágenes. En nuestro proceso de memoria, una simple imagen—una que podríamos llamar universal—puede provocar al espectador a recordar mucho mas de lo que está representado. Intento activar la memoria personal reduciendo imágenes a sus componentes más básicos. Utilizo elementos simplificados, familiares, y repetidos para actuar como un estímulo para recordar imágenes que serán coloreadas por el punto de vista y las experiencias únicas de cada espectador. Este proceso se puede explicar a nivel material. Las variaciones que resultan en el proceso de grabado y que dependen de la repetición estructurada del proceso no son disimilares a las diferencias que nuestra experiencia personal trae a imágenes repetidas y familiares. Materiales y procesos donde existe tanto una cooperación como una oposición a elementos estructurados y recurrentes me permiten investigar la repetición de arquetipos y las anomalías que resultan. Uso pintura, proyecciones de video, y también vino tinto (este último a través de un proceso que he desarrollado llamado vinografía) no solo para explorar nuestra relación a representaciones de lugar y paisaje, pero también a imágenes tradicionales de la mujer. El poder transformativo y universal de las imágenes también tuvo una gran influencia en mi niñez. Al haber crecido en el núcleo de una familia de inmigrantes españoles entre el heterogéneo barrio de Astoria, Queens de la ciudad de Nueva York, muchas veces me moví entre diversos idiomas y culturas. Como consecuencia de ello, me empecé a interesar en la profundidad de discurso que podría resultar sin un idioma común escrito u oral. Encontré imágenes que se manifestaban una y otra vez a través de la cultura, la geografía y el tiempo. Las variaciones en estas formas repetidas conducen a un entendimiento más profundo de nuestra posición y nuestro lugar único, mientras la universalidad de las imágenes crea un punto de entrada para una amplía gama de espectadores. La investigación de lo personal y lo universal se refleja también en mi labor como profesora, donde observo la gran variedad de resultados producidos por alumnos creando obra regida por ciertos parámetros técnicos y materiales que facilitan la expresión de la experiencia personal y el punto de vista único de cada alumno. En proyectos públicos, he desarrollado una estructura para la participación de la comunidad dentro de un armazón establecido que permite que sobresalgan las contribuciones de cada individuo mientras a la vez se facilita el entendimiento a través del tiempo y de la cultura. Para dos proyectos comunitarios trabajé con jóvenes sin techo en un el albergue Covenant House en Newark, NJ junto a alumnos de un instituto de un suburbio en el norte de New Jersey. Los murales resultantes incorporaron siluetas de los participantes, en poses de su elección, expresando ideas que son a la vez universales y únicas, no solo a los participantes sinó también a espectadores futuros.